Tras una sesión extraordinaria del Consejo de Gestión de Riesgo en Santa Marta, fue declarada la calamidad pública sobre el kilómetro 19, en la vía Ciénaga-Barranquilla, en donde el agua está a punto de atravesar la barrera de rocas que impedía el avance de la erosión. 

Con esta declaratoria, la Gobernación del Magdalena contaría con 2.700 millones de pesos para poder intervenir la vía nuevamente y encontrar una nueva solución que, a mediano plazo, impida que la vía sea alcanzada por la erosión y las olas. 

En días pasados, la Gobernadora de ese Departamento, Rosa Cotes, estuvo en el lugar de la afectación, acomapañada por congresistas, diputados y expertos en el tema, quienes manifestaron la urgencia para lograr la intervención de la vía. 

No es la primera vez que el kilómetro 19 es abordado para tratar de detener la erosión que avanza rápidamente en este punto de la carretera.

En 2010, durante la administración de Omar Díazgranados, también se declaró la urgencia manifiesta y se contrató la instalación de unos espolones en el agua que de poco sirvieron para disminuir la erosión. 

Años después, durante la administración de Cotes, tras denuncias periodísticas que daban cuenta que el mar estaba a 8 metros de la vía, sel logró conseguir recursos del orden nacional para la instalación de un empedrado que ya es insuficiente para mantener la vía resguardada de la amenaza.